sábado, 2 de marzo de 2013

La herida de Villamediana

Viernes en la Fundación. Miguel Casado presentaba su último libro: una recopilación/recuperación de ensayos sobre poesía titulada "La palabra sabe", en Libros de la Resistencia.

Me gustó mucho el esfuerzo discursivo de Rosa Benéitez, disipado cuando se limitó a leer. Casado fue escueto y estuvo certero.

Ullán, Machado, Ashbery... muchos poetas fueron apareciendo a lo largo de la velada. Pero la presencia que más me estimuló fue la del Conde de Villamediana. La herida que le provocó la muerte pareció reabrise ante nosotros con sus tintes literarios, sexuales, religiosos y políticos.

Palabra, herida y... archivo. El lugar en el que fue enterrado el cuerpo de aquel poeta barroco, originalmente una iglesia conventual de la Orden de San Agustín, terminó por ser un archivo.



De eso y de otras cosas hablé después con Pepe Sánchez y Pedro Villalón en El Farolito rodeados de bulliciosos grupos de jóvenes en busca de diversión.

Tumba y muerte de olvido solicito,
aunque de avisos más que de años cano,
donde hoy más que a la razón me allano,
y al tiempo le daré cuanto me quito.


[Imagen tomada del blog: http://forega.blogspot.com.es/2009/01/juan-de-tassis-conde-de-villamediana.html]